Una familia de Pueblo Esther volvió a su casa y se encontró con que la puerta estaba abierta. Al acercarse, se dieron cuenta de que había sido forzada. Con mucho miedo, encendieron las luces y observaron que el fruto de su trabajo había sido robado. El joven matrimonio y sus hijos se habían ido temprano a trabajar y regresaban para cocinar, comer y descansar, pero los ladrones alteraron su rutina, dejándolos con mucha bronca, dolor e impotencia.
Rápidamente intentaron buscar testigos entre los vecinos, pero no encontraron ninguno. Hicieron la denuncia y ahora esperan que los investigadores les devuelvan no solo lo material, sino también la tranquilidad que buscaban cuando eligieron mudarse a la ciudad para formar su familia. Llama la atención tanto a ellos como a los vecinos la naturaleza del hecho, ya que la esquina donde viven es una de las más transitadas de la zona, que limita con el barrio Country 16.
El mismo día que se conoció esta noticia, también se supo de un robo más violento y multimillonario en un barrio privado de la misma localidad.
La nota completa con Gastón se puede ver en el siguiente video.