Minutos antes de la medianoche del pasado sábado, un individuo armado ingresó a la estación de servicio ubicada en Mendoza al 7600 y disparó tres veces contra un joven que desempeñaba sus labores como playero. Trágicamente, el trabajador perdió la vida poco después. Los perpetradores dejaron una nota amenazante dirigida al gobernador Maximiliano Pullaro y su ministro de Seguridad, Pablo Cococcioni, abordando la situación carcelaria en Santa Fe.
Con 25 años, este joven se convierte en la nueva víctima de la creciente ola de "terrorismo callejero" que azota nuestra ciudad en los últimos días, intensificándose con los crímenes de los taxistas y el brutal ataque al colectivero que lucha por su vida.
Se informó que la víctima recibió dos disparos en el pecho y otro en la cabeza.
En relación a los autores del homicidio, los primeros informes sugieren que se desplazaban en un automóvil con daños, con dos ocupantes a bordo.
Adicionalmente, la nota dejada menciona al gobernador y al ministro de seguridad en relación a cuestiones penitenciarias. Es importante señalar que este sábado por la tarde apareció un cartel colgado en bulevar Oroño y Circunvalación advirtiendo sobre futuros actos violentos contra personas "inocentes".
Ante la crítica situación de seguridad en Rosario, marcada por los homicidios de dos taxistas en noches consecutivas y el grave ataque al colectivero, el gobierno nacional ha decidido enviar un refuerzo de efectivos de Fuerzas Federales para patrullar las calles de la ciudad, con apoyo logístico del Ejército Argentino.
La ministra de Seguridad de la Nación, Patricia Bullrich, activó el Comité de Crisis para Rosario a solicitud del gobernador de Santa Fe, Maximiliano Pullaro. Las autoridades solicitaron el respaldo de las Fuerzas Armadas en las operaciones de seguridad interior en Rosario, en virtud del artículo 27 de la Ley de Seguridad Interior Nº 24.059.
Bullrich anunció que el próximo lunes se brindará una conferencia de prensa para detallar el "plan de refuerzo contra la narcocriminalidad" en Rosario. En un comunicado, expresó: “Si no ponemos un freno urgente, la violencia va a seguir escalando. Rosario sangra. Y no necesita un simple torniquete para mejorar. Necesita una cura definitiva. Por eso vamos a ir a fondo. Con firmeza, sin que nos tiemble el pulso”.
Además, advirtió que todo acto de violencia en la vía pública o lugares públicos será considerado inicialmente como un intento de aterrorizar a la población o condicionar a las autoridades, por lo que se denunciará como un acto de terrorismo, según las competencias del comité de crisis integrado por el gobernador, los líderes de las 5 Fuerzas Federales y representantes del ministerio nacional.