Maximiliano Pullaro, gobernador de Santa Fe, discute la reciente ola de violencia en Rosario, atribuyéndola a años de impunidad y desatención. Destaca cambios en las cárceles para combatir la actividad delictiva y niega acusaciones de tortura, subrayando el cumplimiento de la ley. Reconoce la presencia estatal en los barrios, señalando el origen del problema en la falta de acción contra la violencia. Además, critica la demora de la Justicia Federal en abordar casos clave, lo que permitió el fortalecimiento de organizaciones criminales.