Milett Figueroa dejó Argentina, generó un impasse en su relación con Marcelo Tinelli, el conductor del Bailando 2023, y se fue a Perú. En el regreso a la tierra de sus orígenes, la participante del certamen de América se decidió por un importante cambio de look.
"Hola, ¿cómo están? Quería pasar por aquí para desearles una Feliz Navidad... Llegué hace 2 días a Perú para pasar las fiestas con mi familia, con mi mamá, con mis primos y mi tío, Enrique, y mi hermana", compartió , ya instalada en el país sudamericano.
"Acá estamos compartiendo un poquito y la estamos pasando muy bien. Espero que ustedes también la estén pasando muy bien con la familia y los amigos, que son familia también. Quiero agradecer por toda la sabiduría que nos ha traído este año, por todos los aprendizajes y por el amor...", expresó Figueroa, a través de un
Por su parte, Marcelo, a miles de kilómetros de distancia, pasó las fiestas con sus hijas, su primo El Tirri, y Mimi Alvarado, la mujer del histriónico músico, que aprovechó la ocasión familiar para compartir sus conocimientos sobre Papá Noel. Aseguró que no es de origen americano sino finlandés y que su color primitivo no era el rojo sino el amarillo.
Quizá, el dejar Argentina para regresar a su tierra natal, Milett apostó a renovar su imagen y dejar atrás la estética con la que se hizo conocida en la tele local. Una de las primeras cosas que hizo la artista al volver a la capital peruana fue pasar por la peluquería.
Figueroa se animó a dejar atrás sus tiempos con cabello largo y abandonó, por lo menos por la temporada de verano, las extensiones que hacía que su cabello luzca extenso. Y a eso le sumó un corte al borde de los hombros que renovó la estética de su rostro.