El Napoli volvió a ser campeón en Italia luego de 33 años y sus fanáticos vivieron una fiesta inolvidable en el estadio Diego Armando Maradona, donde no se estaba jugando el partido. En Udine, al norte del país, el equipo de Luciano Spalletti empataba 1-1 con Udinese gracias al gol del nigeriano Victor Osimhen en el minuto 52 del encuentro de la 33° fecha de la Serie A.
Los tifosi napolitanos que no pudieron viajar a alentar a su equipo al Dacia Arena se congregaron en masa en el ex San Paolo y lo colmaron, a la espera de la noticia más esperada. La cancha se tiñó de celeste y el encuentro ante Udinese se vio por pantalla gigante. En el centro del campo de juego desplegaron una lona con el escudo del club y al momento del gol del Napoli se produjo una explosión de gritos.
Con la emoción a flor de piel por un suceso que había tardado más de tres décadas en repetirse, la afición del Napoli estalló con el gol del campeonato, como si se estuviera jugando el partido en el Diego Maradona. Se encendieron las bengalas rojas en cada una de las tribunas y las 54 mil personas corearon el nombre de su héroe.
Una vez que el árbitro pitó el final del encuentro y los jugadores se abrazaban con los simpatizantes que pudieron estar en el lugar de los hechos, la ciudad de Nápoles se llenó de enfervorizados fanáticos que comenzaron a cantar y celebrar la conquista del tercer Scudetto de su historia y el primero luego del paso de Diego Maradona, que marcó un antes y un después en la escuadra sureña. La fiesta promete alargarse hasta altas horas de la madrugada y el próximo domingo 7 de mayo, cuando el campeón reciba a la Fiorentina para dar la vuelta olímpica con toda su gente.
Fuente: INFOBAE