Este miércoles todas las miradas del mundo del fútbol estuvieron puestas en el estadio Parque de los Príncipes de París. Allí, Lionel Messi volvió a jugar un partido oficial con el PSG luego de levantar la Copa del Mundo con Argentina -tras vencer en la final a Francia- en Qatar 2022. Al final, no hubo homenaje ni reconocimiento especial de parte del club para Leo, que se mostró en muy buen nivel y convirtió el segundo gol en la victoria por 2-0 ante Angers.
En la previa se habló mucho sobre cómo lo recibirían los hinchas locales, que durante la mayor parte del tiempo se mostraron indiferentes. La excepción fue cuando el rosarino anotó el segundo tanto del equipo, ahí recibió una ovación desde los cuatro costados.
Además, el crack rosarino también participó en la jugada del primer tanto. Tras recibir la pelota entre varios rivales, se las ingenió para acomodarse y ceder para Nordi Mukiele, que luego asistió a Hugo Ekitike.
El cuadro parisino festejó ante su gente y estiró a seis la ventaja con respecto al Lens, su inmediato perseguidor, cuando se han disputado ya 18 fechas de la Ligue 1.

Antes del partido, hubo un homenaje pero para el legendario Pelé, fallecido el pasado 29 de diciembre, al que Messi se sumó por su cuenta al vestir una remera con su cara en el calentamiento previo.
Leo salió a la cancha del estadio Parque de los Príncipes con una remera que contenía el rostro de un joven Pelé y la inscripción: "Eterno Rey".

Fuente: Rosario 3