Rosario Central cayó 1-0 frente a Banfield este lunes en el Gigante de Arroyito, por la fecha 15 de la Liga Profesional de Fútbol. Agustín Urzi anotó el único gol del partido con la complicidad del arquero Gaspar Servio, en el primer tiempo. El Canalla mereció, al menos, el empate y tuvo algunas chances muy claras, pero falló en la definición y también se encontró con la figura del arquero Cambeses. El Taladro, que terminó con uno menos, volvió a ganar después de ocho partidos.

La primera llegada clara de la tarde fue para el equipo de Carlos Tevez. Un centro desde la derecha encontró a Mateo Tanlongo en el punto penal, el volante cabeceó y el arquero Cambeses salvó su valla a puro reflejo.

El Taladro sorprendió y pegó primero, cuando Central atacaba y estaba mejor perfilado. En una salida desde el fondo, movió la pelota de derecha a izquierda, el Canalla no llegó a cubrir espacios y Agustín Urzi sacó un zurdazo desde fuera del área. La pelota fue a donde estaba parado Gaspar Servio, pero el arquero reaccionó tarde y no pudo evitar el 0-1.

A Central le faltó sorpresa. Fue paciente y nunca se desesperó, una virtud a destacar luego de verse en desventaja en el resultado, pero ese juego previsible, aunque le permitió acercarse al arco rival, también le facilitó la tarea defensiva a Banfield, que se mantuvo ordenado y aplicado para no dejar jugar cómodo a Facundo Buonannote y a los demás volantes.

Para el segundo tiempo, el Apache movió el banco y mandó a la cancha a Gustavo Ramírez y Alan Marinelli para renovar el ataque e ir en busca de la igualdad. Y un rato después a Franco Frías y Gino Infantino. Mejoró en juego y consiguió ser más peligrosos que en la etapa inicial, pero cuando estuvo de cara al gol falló en la definición o se topó con la figura de Cambeses.

Primero tuvo el empate en los pies de Buonanotte, asistido por Marinelli tras una rápida contra de arco a arco. El pibe canalla la tocó por encima del arquero y la pelota se fue a centímetros del palo derecho.

También estuvo a nada de quebrar el cero mediante un cabezazo de Cristian Báez. El defensor ganó en las alturas y el arquero Cambeses, como en el primer tiempo, voló para sacar la bocha sobre la línea cuando parecía que se le colaba.

Central, a esa altura, había acumulado méritos suficientes para equilibrar el marcador, pero no lo pudo plasmar en el marcador. Banfield se agrupó con solidez en su campo y prácticamente no le dejó espacios, por eso fueron pocas las veces que el equipo de Tevez estuvo de cara al gol.

La esperanza auriazul se fue apagando con el paso de los minutos, ahora sí, más apurado por el reloj y porque no le terminaba de encontrar la vuelta al partido. La floja respuesta de Servio en el gol cobró mucha más relevancia dentro de un juego que se definió en los detalles a favor del equipo de Claudio Vivas.

El arquero Cambeses se erigió como figura a partir de un par de excelentes intervenciones, pero Central estuvo lejos de su mejor versión y volvió a padecer la irregularidad que mostró después de las victorias ante Newell’s y Arsenal. Ya sin ideas y nervioso, el encuentro terminó con muchos parates por las botellas que tiraron desde las plateas y con Romero expulsado en el Taladro. Sin embargo, el resultado no se movió.